viernes, 7 de junio de 2013

De como la vida se te vuelve una mierda...

Llega un momento en que rendirse es bueno, odiar es bueno, sentir que ya no puedes más es bueno. A mí me llegó ese momento, ahora, aquí, en este preciso instante en que escribo este post. Me gustaría despedirme de todo el mundo y no preocuparme más por todas estas cosas que tengo en mi cabeza y que evidentemente han salido mal. Porque no soy feliz. Todas las expectativas se han ido al suelo, todo lo que iba a ser un lindo nuevo comienzo se ha vuelto una pesadilla y pareciera que cada aspecto de mi existencia se esmerara en no permitir que lo olvide. La vida se volvió una mierda.
Dedicas toda una vida a compartir con alguien, y da igual, finalmente se va, se muere y tú sigues acá, cargando con mil cosas que no deberían corresponderte e incluso más y el mundo cree que porque no te rasgas las vestiduras ni vives llorando o alardeando de lo que tienes en el pecho entonces todo es fácil. Creen que vivir sin una razón de ser es fácil. Creen que no ser nadie es fácil.
No ser alguien se vuelve algo realmente dificil cuando tu expectativa de vida era algo completamente distinto, cuando soñaste siempre lograr un proyecto y hacías cosas que creías valdrían la pena para ser feliz cuando fueras grande. Ya eres grande y nada de eso se logró. Y estás acá, sola, sin un logro que en este momento te represente algo de felicidad en algún aspecto de la vida y con mil obligaciones y responsabilidades que no ejercen ninguna motivación. Todo te salió mal, y peor aún sigue saliendo mal. Pero como para tí la vida es supuestamente fácil todos te miran, te juzgan y te retan y se te acaba el optimismo, y el conformismo y todo es una mierda. Y no eres capaz de dejar todo botado. Y tienes un compromiso con la naturaleza que no te deja abandonar todo, pero sigues sintiendo que no vale la pena. Que es momento de rendirse, que ya no puedes más, ya es caída libre y no sabes cuando vas a parar, en dónde es el fondo, pero es tu carga, una que te asignaron sin pedirla, que no te corresponde pero debes cumplirla porque no tienes nada más qué hacer, porque ser nadie es fácil. Todo salió mal, esta no es la vida que se supone que llevarías, no estás donde se supone que estarías ni con las personas que pensaste que te rodearían. Y todo sigue saliendo mal, y ni siquiera hay un indicio de que vaya a mejorar.
No ser alguien no es fácil, y peor aún que todo el mundo piense que en este momento eres alguien completamente distinto a quien en realidad eres.

"Tranquillité d'espirit..."
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